lunes, 15 de octubre de 2018

PRIMERAS HORAS CON CAOS



Debían de ser las 2 de la mañana cuando me desperté. Abrí los ojos y no sabía donde estaba. La oscuridad era total. Algo de agobió sentí durante unos segundos hasta que caí en la cuenta que estaba en Kathmandú.
No estaba en mi casa habitual sino en un hotelito en la vecindad. Mi habitación está siendo ocupada por los familiares de Vidyay, ya que el lunes 15 se casa su hijo,.. y a la que he sido invitado.

El vuelo de llegada fué como previsto, pero nadie te quita el cansancio de tantas horas de vuelo. 12 entre pitos y flautas.
THAMEL
Rup me hizo esperar en el aeropuerto. El tráfico debía ser infernal como es habitual, pero finalmente llegué al htl Elbrus Home donde dejé el equipaje para inmediatamente subir a casa.
Me tenian preparado un recibimiento gastronómico a  base de momos, arroz, pasta, ... y cervecitas frescas.
El mundo hindú se está preparando para una de las grandes festividades de su religión. Quizás la más importante : Dashain... Las calles están atestadas de gente, de coches, de motos...
En menos de 24 horas se vaciarán y las carreteras de salida estarán abarrotadas de autobuses, con miles de nepaliés que van a sus pueblos de origen para celebrar las fiestas en familia.
Yo no me voy a meter en esa borágine tan extresante, y nada más pasar la boda me iré a vivir a Gokarna. 
CAOS EN KATHMANDU
No sé si sabrán que he llegado a Kathmandu.

El sábado por la mañana después de pasar por Pashupati, centro religioso por excelecia, donde el rio sagrado Bagmati recoge las cenizas de los cuerpos que son incinerados en su orilla oeste, me dirigí a Maiti Nepal donde me encontré con muchos niños y niñas que se alegraron tanto como yo de volvernos a encontrar. Ya están de vacaciones, y algun@s se han marchado con los familiraes que puedan tener en esos pueblos remotos de Nepal.
En una semana todo volverá a la normalidad y podremos hacer todos juntos muchas cosas.
Acaba de empezar la aventura
Con la alta provabilidad de estar incomunicado algunos días.

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