El tiempo se ha asentado definitivamente. Todos los días son similares. Atardeceres y amaneceres con temperaturas que rondan los 14ªC y altas temperaturas durante el día entre 24 y 27º, por lo que una tarde aprovecchamos a dar un paseo por el campo, pasadas las 15 hrs. y como destino final un templo hindú construido a las orillas del sagrado rio Bagmati : Uttar Bahini Temple.
Las chicas salen con sus mejores vestidos que colorearán los caminos por donde pasemos. Su calzado, unas simples chancletas, es el menos apropiado para caminar sobre piedras y caminos inestables. Hay que añadir que 3 de las chicas tienen ciertos problemas de mobilidad, por lo que debemos tener cuidado, Yo personalmente me encuentro en una situación similar debido a esa pesadita contractura que me limita enormemente.
Es una zona rural donde se siente la mano del hombre en los cultivos de arroz. Cuando ha empezado a calentar el sol y a secarse los campos de arroz ha comenzado la siega, que siguen haciéndola a mano.
Caminamos despacio. Sube y baja, sube y baja pero sin mayores dificultades, aunque siempre con cuidado. Y con cuidado de los monos que de vez en cuando se dejan ver, con cara de pocos amigos.
Las montañas del oeste nos protejen del sol que se va poniendo y ya no se siente calor, absolutamente.
En el templo aprovechamos para hacer unas fotos de grupo y con mucho cuiado iniciamos camino de vuelta para deternernos en un puesto de comida para degustar ( ellas ) lo que aquì llaman Pani Puri.
Una vez más ha sido una tarde extraordinaria.
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