La niebla matinal parecía que se hubiera agarrado a la
tierra, pero el poder del sol hizo que con el paso del tiempo se disipara y el
día fuera radiante como siempre en este periodo del año.
Una vez me hubiera
comido un suculento Dhal Bhat, decidí irme con la bici a Bouthanath…. En la
calle que llega hasta Boutha hay cientos de camiones y autobuses aparcados en
espera de combustible, con lo que reducen la anchura de la calle y el poco
tráfico que hay tapona la calle, por lo que he de ponere pie en tierra y
caminar. Es muy peligroso. No solo por la anarquía con que conducen estas
gentes, sino por los miles de baches de la calle, que hacen más insegura la
conducción de una bicicleta.
Ya en la puerta me encuentro unos amigos españoles,
con los que más tarde tendré una extensa charla, pero antes tengo que sentir
una sensación inesperada. Entro con mi pase de voluntariado en este recinto :
Bouthanath, la stupa más grande del mundo y lugar emblemático por excelencua
del budismo y los tibetanos. Según levanto los ojos me encuentro con que la
stupa está casi destruida. El terremoto ha dañado considerablemente la parte
superior de la misma. Faltan los ojos de Buda que miraban a los cuatro puntos cardinales
de la tierra y los siete anillos dorados de forma cónica, que estilizaban la stupa.
Se me ha caido el
alma a los pies.
He sentido una profunda pena al ver semejante paronama.
Se han
puesto manos a la obra y la están reconstruyendo. Por cierto es lo único que se
está haciendo en el pais, los únicos trabajos de reconstrucción, hasta dónde yo
he visto. Mis amigos me ha contado que un monasterio de la zona está muy
interesado en que Boudtanath vuelva a ser lo que fue. Mucho dinero están
empleando para que Buda resucite. Con los amigos charlamos largamente sobre el
único tema de conversación de este pais en el último mes : El bloqueo. Ellos
que viven aquí me corroborant las percepciones e informaciones que me están
llegando por lodos los lugares : La gente lo esta pasando francamente mal, y los
politicastros son los culpables de la desesperación a que se ve imbuido el
pueblo nepalí.
Solo hago 2 fotos. Antes, en ese mismo periodo de tiempo hubiera
hecho 200. Me despido de los amigos.
Con tristeza e impotencia doy una vuelta a
la stupa y vuelvo para Gokarna. De vuelta a casa consigo encontrar un lugar
donde venden globos. No es fácil encontrarlos. Compro unas cuantas decenas.En
Gokarna comienzo a inflarlos y repartirlos entre las chicas. El color de los
globos y el colorido de sus vestidos me muestran un extraordinario escenario
para fotografiar. Nos lo pasamos pipa… De este modo se me pasa el mal trago de
la mañana.
El cielo empieza a oscurecerse. Se escuchan truenos y finalmente
llueve. Y yo me pregunto…¿Cómo se van a hacer la cena todos aquellos que tienen
que cocinar con fuego de leña en la
calle? Pues nada : ! a la cama sin cenar!!!!! Como si fuese un castigo.. Ha estado toda la noche sin parar de
llover. Lluvia persistente que por fortuna ha hecho que los perros que viven a
5kms a la redonda no ladrasen…
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